El día 3 de octubre hacemos la primera medida de las plantas después del verano. Comprobamos que todas las especies habían crecido, aunque algunas mostraban ciertas particularidades. Atriplex halimus había desarrollado tallos muy altos, en algunos casos de caso 2 metros, pero gran parte de sus hojas se habían marchitado y había caído. Varios pies de Maytenus senegalensis estaban afectados por una cochinilla. Numerosos ejemplares de Lygeum spartum habían sido ramoneados por los conejos, como se evidenciaba por el corte casi perfecto de las hojas en su parte superior.